Cuando empecé a patinar no imaginaba el abanico de posibilidades que me ofrecería esta afición. Una de ellas es la de viajar siempre con mis patines.
En lugar de visitar las ciudades a pie o vehículo motorizado
porque no utilizar los patines como medio de transporte? Lo habéis intentado
ya?
Un compañero patinador ha ido más allá y ha abierto su
propia agencia de viajes y por simpatía hace un 5% de descuento a todos los
patinadores que pertenezcan a algún club o escuela. A pesar de que sus precios
son muy ajustados se compromete a mejorar cualquier presupuesto. Su lema es “Tú sólo
viaja que del resto nos encargamos nosotros”, como diciendo que solamente te
tienes que preocupar de disfrutar del viaje que para eso tienes un
agente/asesor detrás... El link de la agencia es www.tusoloviaja.com
Podemos proyectar el viaje con la prioridad de patinar o
como elemento complementario de nuestras vacaciones.
Una opción es planear nuestras visitas en función de las
rutas organizadas que previamente habremos localizado a través de internet. Es
importante conocer día, hora, lugar de salida y nivel para afinar más nuestro
objetivo. Es interesante, a poder ser, darse a conocer previamente y avisar de
nuestra visita para facilitar el encuentro. Y así ir enlazando ciudades y
países asegurándonos el poder patinar en grupo.
En el trayecto, los patines se convierten en un báculo que
forja buenas amistades. En la mayoría de mis desplazamientos nacen afectos que
crecen con el tiempo. Es curioso como muchas veces en los rincones más
singulares encuentras patinadores de otros países que han ido llenando tu
agenda a través de tu afición de patinar.